La buena información ayuda a salvar vidas y a proteger equipos

Para los profesionales implicados (ingenierías, integradores, instaladores…), la seguridad en entornos industriales con riesgo de explosión es un tema muy importante. La normativa ATEX no solo asegura el cumplimiento legal, sino que también salva vidas y protege equipos. Para ayudar a nuestros clientes a comprender a fondo esta reglamentación y a descubrir sus aplicaciones prácticas, recientemente ofrecíamos esta formación en Galektra.

Soluciones ATEX en Grupo Elektra

Un día perfecto para saber todo sobre ATEX en Galektra

En esta jornada técnica ATEX, magistralmente conducida por nuestros compañeros de Galektra Héctor de Diego y Juanma Naveira, combinamos formación experta y demostraciones prácticas.

Todos los asistentes sacaron el máximo partido a esta oportunidad única para resolver dudas, estar al tanto de las novedades de las normativas, adquirir nuevos conocimientos y descubrir las últimas innovaciones del mercado.

Este es un resumen de lo que aprendimos.

Obligaciones de las partes implicadas

La normativa ATEX regula los requisitos esenciales para trabajar en ambientes con riesgo de explosión (ATmosphères EXplosives) debido a mezclas inflamables de gases, vapores, nieblas o polvos combustibles.

Los asistentes a esta jornada en Galektra aprendieron que la ley establece responsabilidades específicas para cada uno de los actores en el entorno de trabajo. Por ejemplo:

• El empleador debe garantizar la seguridad del entorno laboral mediante la evaluación y clasificación de las zonas de riesgo, además de proporcionar equipos y medidas de protección adecuados.
• Los fabricantes de equipos ATEX tienen la responsabilidad de certificar que sus equipos cumplen con los estándares de seguridad para su uso en zonas clasificadas. Esto incluye pruebas y controles de calidad que demuestren la resistencia a ambientes explosivos.
• Los contratistas deben estar al tanto de las zonas de riesgo y de las condiciones bajo las que se puede trabajar en ellas. Han de seguir los protocolos de seguridad y solo utilizar equipos que cumplan con la normativa ATEX.

La designación de códigos en equipos ATEX

Los equipos ATEX están identificados mediante códigos específicos que indican el tipo de protección que ofrecen y el tipo de atmósferas en las que pueden usarse. Estos códigos proporcionan información clave para seleccionar el equipo adecuado.

A modo de ejemplo, si nos encontramos con un equipo ATEX con el siguiente código,

deberíamos “leerlo” de la siguiente manera:

• II: Indica que el equipo es para su uso en zonas con atmósferas peligrosas de la industria en general (excluyendo minería subterránea, que usa “I”).
• 2G: Indica la categoría de equipo (su nivel de protección según D.E. 94/9/EC). “2” indica nivel de protección ALTO (equipo para zona 1). La “G” nos informa de que el tipo de atmósfera es gas (mientras que D sería para polvo).
• Ex: Marca de seguridad para atmósferas explosivas.
• db: Tipo de protección del equipo, en este caso “db” significa “modo de protección antideflagrante”.
• IIB: Grupo de gas en función de su peligrosidad, donde “IIB” se refiere a gases como etileno, mientras que “IIC” sería para los más peligrosos, como el hidrógeno.
• T4: Clasificación de temperatura máxima superficial del equipo. En este caso T4 significa que la temperatura superficial del equipo estará entre los 135ºC y los 200ºC. Esta temperatura ha de ser menor que la temperatura de ignición del gas o polvo explosivo.
• Gb: Nivel de protección de equipo (EPL según IEC 60079-0). En este caso la “G” indica gas y la “b” indica que es un equipo con un nivel de protección MUY ALTO (Zona 2).

Veámoslo más claro con un caso práctico: imagina que te piden instalar en una refinería un motor eléctrico. En el análisis previo, descubres que es una zona con riesgo de presencia de gas etileno. Bien, con ese código anteriormente citado, “II 2G Ex db IIB T4 Gb”, puedes identificar que el equipo es adecuado para ese entorno y que no representa un riesgo de ignición.

Los asistentes a esta charla de Galektra ya saben más sobre los códigos. Si tú también quieres saber más, pregunta en tu punto de venta más cercano… ¡y reserva tu plaza en la próxima formación exclusiva para clientes de Grupo Elektra!

La clasificación de las zonas de riesgo ATEX

La normativa ATEX clasifica las áreas de trabajo en función de la frecuencia y duración del riesgo de atmósferas explosivas, tanto para gases como para polvos.

Zonas para GASES (G):

• Zona 0: La atmósfera explosiva está presente de forma continua o durante largos períodos (ejemplo: el interior de un tanque de combustible).
• Zona 1: La atmósfera explosiva está presente ocasionalmente durante operaciones normales (ejemplo: una sala de bombeo donde se manipulan productos químicos volátiles).

• Zona 2: La atmósfera explosiva rara vez ocurre y, si lo hace, es por poco tiempo. (ejemplo: el área circundante de un depósito de gas al aire libre.)

Zonas para POLVOS (D):

• Zona 20: Presencia constante o frecuente de polvo combustible en suspensión (ejemplo: el interior de un silo de cereales).
• Zona 21: Polvo combustible en suspensión presente ocasionalmente (ejemplo: la zona aledaña de un mezclador de harina en una panificadora industrial).
• Zona 22: Presencia de polvo combustible rara y de corta duración (ejemplo: alrededor de un punto de carga de material en una planta de cemento).

Medidas de protección necesarias en entornos ATEX

Las medidas de protección se utilizan para reducir el riesgo de ignición de una atmósfera explosiva. Estas medidas pueden ser de varios tipos, y la elección depende de la zona de riesgo, el tipo de sustancia (gas, polvo) y las características del lugar.

Estas son algunas de ellas:

• Protección antideflagrante (Ex d): El equipo está diseñado para contener una explosión interna y evitar que esta se propague al entorno.
• Encapsulado (Ex m): El equipo está completamente encapsulado en resina u otro material protector, evitando que entre en contacto con el exterior.
• Seguridad intrínseca (Ex i): El equipo limita la energía, de modo que incluso si se produce un cortocircuito, no tiene suficiente potencia para causar una explosión.

Vamos con un ejemplo práctico: en un taller de pintura, el cual contiene solventes y gases inflamables, puedes utilizar una lámpara de inspección con protección de seguridad intrínseca (Ex i) para evitar que una descarga eléctrica pueda producir una chispa potente que cause una explosión en esa atmósfera rica en vapores inflamables.

Guía de selección de equipos ATEX

En esta jornada técnica también hicimos una sesión interactiva donde mostramos casos prácticos de implementación de la normativa en zonas clasificadas.

Esta parte de la formación permitió a los participantes comprender cómo seleccionar los equipos ATEX más adecuados para diferentes escenarios, basándose en casos reales.

Finalmente, como valioso complemento a esta actividad, ofrecimos a nuestros clientes un tour interactivo con las soluciones más eficientes de los fabricantes líderes del sector de soluciones ATEX.

Puedes conocer y acceder a estos productos en tu punto de venta más cercano de Grupo Elektra. ¡Acércate y pregúntanos!

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En resumen: comprar tu material eléctrico en Grupo Elektra como cliente profesional es empezar tu día con buen pie. ¿A qué esperas para mejorar?

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